Hola bloggers, hoy tengo la desdicha de traerles esta aberración al arte y a las buenas costumbres, es sin duda una de las ilustraciones que más vergüenza me da (y miren que he hecho cada cosa), y también la mas chota que he realizado en los últimos tiempos y les comento por que, va… si les interesa, yo se que a veces me deliro y me pongo a escribir excesivamente y sin ningún tipo de necesidad, pero así soy, que se le va a hacer.
Sino simplemente disfruten de esta “cosa” y no lean la sarta de boludeses que expreso debajo de la primera imagen.

El tema que me compete hoy es el de “¡Elena No!”, como podrán apreciar en mi anterior entrega, las desdichas de Elena y su pareja son el tema principal a explotar en las tiras intituladas “¡Elena No!”, y como comente en aquella ocasión, una tira había sido, en alguna medida, auto-censurada por su alto contenido erótico y ante el pedido de colegas dentro del ambiente, decidí realizar dicha tira. La misma consistía en un acto sexual entre los enanos, el famoso y mal nombrado “pete”, el hecho derivaba en Elena mordiendo el pene de su pareja y el mismo exclamando – ¡Elena No!, pero lo que pasó fue muy extraño…
Lo primero y principal era conocer la fisionomía de los enanos, así que empecé a buscar enanos en la web, enanos “cogiendo” en la web, una vez visualizado la posición ideal para la interpretación del primer cuadrito, puse manos a la obra y comencé con la realización de la escena, pero a medida que lo iba haciendo el pudor comenzaba a aflorar y una vez terminado el primer cuadro decidí que era demasiado para mi, no por dármela de exquisito ni nada por el estilo, el hecho era que no sentía que me representaba como autor esa mal obrada pieza de arte, así que decidí no continuar con los 2 cuadros restantes que completaban la obra. Pero ahí no terminaba la tortura, la maldición de los enanos.
Cuando creí que la obra era, más o menos potable, quise ponerle un poco de color y ese fue mi segundo error…
El primero de los problemas fue el tono de piel de el enano, no importaba el color de piel que le de, siempre me quedaba como negro, y no es que tenga nada contra la gente de piel oscura, el tema era que el enano era blanco y no daba para rehacerlo negro.
Cuando después de un día de “prueba y error” logre aclararle la piel sin que todo el resto del dibujo me quede excesivamente claro.
En fin, una vez que ya estaba cansado de probar boludeses lo deje como creía que más o menos zafaba, así que le baje la cantidad de píxeles para que la imagen no sea tan grande y lo guarde, pero a la ora de abrir el archivo me tiraba un error, de alguna manera el archivo de había “choteado” y ya no podía abrirse y…. y… basta me canse de escribir, chau.